Tu tipo de cuerpo dice mucho más de ti de lo que te puedes imaginar, no solo por su estructura, sino también por la postura y la conducta con que suelen acompañarlo las personas, de ahí que esta mezcla facilite a los profesionales de la salud emocional identificar más rápidamente la herida emocional que podría esconderse detrás.
Son diversos los autores que desde el ámbito de la psicología se han encargado de estudiar este tema, por ejemplo Alice Miller, ha destacado por su trabajo sobre la salud mental infantil, escribió el libro «El cuerpo nunca miente», en donde detalla cómo las experiencias tempranas tienen manifestaciones físicas. También esta el psiquiatra holandés Bessel van der Kolk, reconocido por su trabajo en el campo del trauma y cuyo libro se llama «El cuerpo lleva la cuenta», entre muchos otros.
¿Cuáles son los tipos de cuerpo según la herida emocional?
De acuerdo con Lise Borbeau hay cinco heridas emocionales la de rechazo, la de abandono, de la humillación, la de la traición y la de la injusticia, cada una de ellas podría manifestarse en la estructura y complexión del cuerpo.
El cuerpo con forma de pera – herida del abandono o rechazo
Las personas con este tipo de cuerpo podrían haber experimentado situaciones de abandono o rechazo por parte de sus principales figuras de apego. Causando una acumulación de grasa en la parte inferior del cuerpo como un mecanismo de defensa ante situaciones en las que se sintieron vulnerables. En ocasiones las personas con estas heridas emocionales también pueden tener algunos problemas en su postura, por ejemplo el encorvamiento, los hombros caídos y la pelvis hacia el frente.
El cuerpo en forma de manzana- herida humillación
Se ha especulado que las personas que tienen este tipo de cuerpo podrían haber enfrentado desafíos emocionales relacionados con el control y la seguridad. Según Lise Bourbeau cuando hay una herida de humillación en etapas tempranas de sus vidas, puede haber un aumento de peso en el área abdominal manifiesta ese intento por querer controlar lo que ocurre a su alrededor y como una forma de lidiar con las tensiones emocionales. Las personas que enfrentaron situaciones como la descalificación de sus progenitores, tienden a engordar y a acumular más grasa en el vientre. Tienen una cara pequeña y redonda, con cuello corto. Suelen aparentar menos edad de la que tienen.
El cuerpo atlético- heridas de la traición y la injusticia
Este tipo de cuerpo muestra una herida emocional asociada a una necesidad de protección y seguridad, ya que probablemente durante la infancia se sintieron vulnerables en su entorno familiar. Así, el estar delgados, en forma y atléticos, representa para esas personas una manera de protegerse y sentirse seguros. Tienen la necesidad de tener todo bajo control, por lo que suelen exigirse mucho a sí mismas. Les gusta hacer lo correcto. Su cuerpo es proporcionado debido a esta exigencia y su postura en general es recta, rígida, pues desean mostrar seguridad y fuerza.
Cabe señalar que aunque son varios los autores que han explorado la correlación tipo de cuerpo-heridas emocionales, el peso y la forma del cuerpo también se ven influenciados por factores genéticos, ambientales e incluso culturales, así que lo emocional puede ser solo una causa más. Lo mejor que puedes hacer si identificas alguna herida emocional es acudir a un psicoterapeuta.