La pasión de la Subteniente y abogada Manuela Arango Zuleta la llevó a cumplir sus sueños de ser militar, demostrando que los impedimentos no existen y que siempre hay una manera de salir adelante.
Quería demostrar que su rol como mujer no sería impedimento para desarrollar sus funciones como comandante de una Base Militar.
Su mayor anhelo es ayudar a toda la población civil recorrer todo el territorio colombiano, en donde se encuentran personas extraordinarias que como gratitud regalan una sonrisa, lo que la motiva cada día más, y la impulsa a continuar con su labor.
Buscar retos, el querer superarse y el apoyo de su familia la tienen hoy viviendo lo que soñó de niña: Ser soldado del Ejército Nacional.
Su carrera comenzó en Buena vista, La Guajira como comandante de Pelotón, en donde empezó escalando sus primeros peldaños como oficial de arma.
En el Casanare la joven manizaleña comenzó siendo Comandante de la Base militar de Cerro Barranquilla, en Sacama, Casanare, no fue nada facil, pues sería la primer mujer en afrontar dicho cargo, sin embargo poco a poco se ganó el respeto de sus subalternos, superó todos los obstáculos, y demostró que cuando se quiere se puede, logrando asi materializar resultados operacionales que aportaron a neutralizar las posibles acciones delictivas del enemigo, actualmente es la comandante de 31 hombres en la base militar de Tamara, donde su objetivo es proteger a la población civil y ser ejemplo para sus soldados, demostrándoles que todo es posible.